APRETON
El diecisiete de enero
enfilé hacia jalapa
como cuando viene el papa
había gente de a chinguero,
si te descuidas en cuero
te dejan en la sección
al menos esa ocasión
parecía un carnaval
era estar ahí, mortal,
con tremenda apretasón.

Para arreglar tres asuntos
con Gaudencio quise hablar
ni siquiera pude entrar
menos exponer mi punto,
ni en la libreta de adjunto
logre escribir mi nombre
me punchaba atrás un hombre
le dije quítese el foco
me contesto, estás loco,
es natural, no te asombres.

Se me cayó la carpeta
ahí la deje tirada
estaba de la fregada
teniendo al pie esa bragueta,
empecé a buscar la puerta
para irme a mi regazo
pues ya iba a ver madrazos
mujeres y caballeros
todos querían ser primero
y matarse, no era el caso.

Entre gritos y empujones
las maestras se quejaban
pues muchos aprovechaban
jalándoles los calzones,
platican que sus camiones
perdieron dos compañeros
y uno de los dos que fueron
hijo de Lilia, Roberto,
y no aseguro si es cierto,
le dio para otro; Dinero.

El otro quería una plaza
y su camioneta nueva
un bandido se la lleva
y hoy va a pie para su casa,
miras a la pobre raza
durmiendo en las escaleras
por esa razón se alteran
de Hipotermia que es mortal
van a dar al hospital
con riesgo de que se mueran.
EL TROVADOR FAISANERO




Hubo punchones, bolseados,
groserías, bulla, gritos,
parecíamos toditos
cochinos amontonados,
al ver mucho acelerado
salió a la puerta Gaudencio
nos pidió guardar silencio
para poderlo escuchar
decía : Déjenme hablar
para decir lo que pienso.

Dijo: Plazas solo hay cien
y solicitudes miles
se darán por los perfiles
voy a revisarlas, bien,
yo pensé me lleva el tren
creo que ya no toco nada
y la gente amontonada
seguía dando de madrazos
ahí encaminé mis pasos
con rumbo hacia la chingada.

Me salí de mala gana
pensando que hago horita
y miré una señorita
brincándose una ventana,
ahí me rasgue las canas
luego pensé pobrecitas
allá adentro las viejitas
están sufriendo pesares
mientras que los auxiliares
cuelan a las mas bonitas.

Traté de a la cola irme
que a cuatro cuadras llegaba
y una amiga que ahí estaba
llegó al oído a decirme,
pareces soldado, firmes,
y entre risas me explica
se fue para Posa Rica
ya no va a atender Gaudencio
me fui saliendo en silencio
cual perro con pica pica.

Me fui para la oficina
con Américo Manuel
me invitó café con miel
para calmarme mi mohína,
pensé Gaudencio culmina
cansado de cuerpo y mente
trabaja y viaja frecuente
buscando una solución
y como dijo la canción,
" No hay cama "pa" tanta gente".